Uno de los aspectos importantes a los que hay que prestar más atención es la calidad de las placas filtrantes, que son el corazón del funcionamiento del filtro prensa.
No sólo es necesario seleccionar las placas en función del proceso específico, sino que también es importante estar seguro de la calidad del material y la mano de obra.
Lo primero, por supuesto, es optar por placas filtrantes adecuadas a la necesidad específica, ya que las placas no son todas iguales.
Cambian en tamaño, volumen, material, previsión de otras opciones (como secado, etc.), resistentes a altas temperaturas, con o sin membrana (que puede ser intercambiable o fija), con o sin juntas para evitar goteos, con asas atornilladas o fundidas, con o sin relieve, etc.
Así, en función del pH del producto, la temperatura y el tamaño de la cámara, tendremos identificado el tipo de placa que necesitamos.
Llegados a este punto, es muy recomendable elegir placas de alta calidad en cuanto a construcción y materiales, especialmente en lo que se refiere al tipo de polipropileno (para simplificar nos centramos en este material, que corresponde al 90% de los casos) utilizado (existen placas de polipropileno virgen y placas de polipropileno regenerado, por ejemplo) y en cuanto al mecanizado.
De hecho, las placas filtrantes suelen mecanizarse, precisamente para garantizar uno de los requisitos fundamentales: la planitud.
Entre los distintos requisitos de calidad de las placas filtrantes, la planitud es sin duda uno de los más importantes.
La planitud de una placa filtrante es un requisito de importancia estratégica, porque cuando voy a formar el paquete de placas debo asegurarme de que se respeta la planitud entre la cabeza y la cola de las placas.
Si las placas no están planas, en el momento en que el cilindro presiona el paquete de placas contra el cabezal fijo, puedo tener incluso el bastidor más recto y rectilíneo del mundo que la máquina se doble o deforme de forma peligrosa o incluso irreversible. Este fenómeno se acentúa claramente cuanto mayor es el número de placas.
Por lo tanto, es necesario disponer de placas filtrantes de primera calidad, que una vez instaladas solucionen el problema y permanezcan en vida durante muchísimos años.
Pida siempre el certificado de origen y el número de lote para rastrear la fecha de producción, así nunca tendrá sorpresas sobre el origen.
Desconfíe de quien le ofrezca paquetes de placas usadas sin conocer el origen o que aún repare placas o las enyese con fibra de vidrio, ya que el objetivo final es volver a vender un paquete de planchas una vez que haya expirado la garantía, y entonces tendrá problemas.
Las placas forman parte de los consumibles, mientras que las placas -si están correctamente dimensionadas y elegidas- pueden durar decenas de años.